Entrevista a Elena Manzano. Supervisora de modelado 3D en
Blue & Malone. Casos Imposibles
Licenciada en Bellas Artes por la Universidad Complutense de Madrid en la especialidad de escultura y Master en concept y grafismo para videojuegos en ESDIP Escuela de Arte, Elena Manzano es una joven promesa de la animación. Hace seis años comenzó animando y modelando los personajes del cortometraje Just the beginning, (ESDIP), para pasar a trabajar en simulación y fixing del largometraje Deep, (The Thinklab), nominada a Mejor Película de Animación en 2017. Desde entonces, ha continuado trabajando para ESDIP Animation Studio animando, modelando y supervisando personajes de cortos como Chase o Parches (en producción) y, principalmente de Blue & Malone. Casos Imposibles, único cortometraje de animación 3D e imagen real, labor que ha compaginado con otras producciones como cortinillas animadas de Los Esos de Clan (El Exilio) para CLAN TVE o el modelado de los personajes de la cabecera de la serie Toy Boy (DO postproduction) emitida en Atresmedia y Netflix.
¿Qué significa para ti la animación? ¿Qué es lo que más te gusta de ella?
Empecé como casi todos por la parte más tradicional: dibujando a lápiz y modelando en plastilina. Cuando realmente comprendí que sí que podía vivir de esto fue cuando conocí la profesión al entrar en ESDIP, escuela de arte. Para mí aquello fue comprender que mi sueño podía hacerse realidad. Eso sí, por supuesto con mucha implicación y trabajo duro. Siempre me llevé bien con la tecnología y pasar de esculpir en barro a modelar por ordenador fue algo muy natural para mí que enseguida se convirtió en una extensión de mis manos. Me encanta modelar, para mí es poder dar vida a personajes, objetos y entornos, definiendo sobre su piel, sus marcas y sus peculiaridades, sus maneras de pensar, ser o funcionar. Creo que modelar no es solo construir lo que se ve, hay un gran trasfondo detrás de cada personaje o elemento que lo hace ser único y especial y eso es lo que me gusta crear.
Has sido animadora, modeladora y supervisora de modelado en Blue & Malone. ¿Con qué etapa disfrutaste más y por qué?
La parte que más disfruté fue, sin duda, el modelado de los personajes y sus expresiones faciales. Fue muy divertido crear sus gestos y sus muecas cuando aún no tenían rig y, por lo tanto, era la primera vez que los veíamos «vivos», riendo o llorando. También fue complicado, ya que partía de unos bocetos a lápiz geniales pero bastante abstractos de Arturo Hernández, así que para modelar me basaba más en generar las mismas sensaciones que transmitían sus dibujos que en la forma en sí, de manera que llegué a entablar una profunda relación con ellos.
¿Qué destacarías del corto Blue & Malone?
El verdadero reto fue la Maria Luisa, crear el exterior y sobre todo el interior de esa gigantesca nave tortuga mecánica y hacer que todos sus componentes parecieran funcionar unidos para que semejante máquina se moviera y encajasen bien por dentro y por fuera. La clave de este tipo de enviroments no es tanto que funcionen realmente a nivel mecánico, sino que «parezca» que funcionan. Otro aspecto importante fue coordinar, junto con Sara Velázquez, la Directora de Arte, a un equipo de unos diez modeladores, alumnos y profesionales, para que todo tuviera la mayor coherencia y credibilidad estética y se alcanzase el nivel de modelado realista que necesitábamos para que quedase fantástico pero creíble cuando el personaje de Berta estuviera dentro.
Te han bautizado como “la madre de Gato”, ¿cómo fue la creación de este personaje?
La creación de Gato ha supuesto más de tres años de mi vida. Ha habido varias personas diseñándolo, poniéndole pelo, texturizándolo… Pero en el área de modelado siempre estuve yo desde el principio. Empezamos haciendo bocetos en 3D de él cuando aún no teníamos clara su forma pero sí quién y cómo era. En total habré modelado unos cinco o seis Gatos distintos hasta que llegamos al definitivo. Junto con el director, Abraham López, definimos a Gato primero desde su esencia, luego desde su carácter y finalmente las diferentes facetas de su forma. Gato tiene un 70% de felino, un 20% de oso, un 9% de gorila y un maravilloso 1% de chaquete. Hay mucho más de Gato de lo que se deja ver de momento. Al principio, tenía hasta un universo de constelaciones en las sombras cambiantes de su pelaje…Porque él no es un amigo imaginario más… Pero con suerte todo esto lo descubriréis en futuras aventuras de nuestros detectives imaginarios 😉
Algunos de los trabajos realizados por Elena Manzano o en los que ha participado